sábado, 26 de julio de 2008

Ese maravilloso Cristo

Encontré el otro día una imagen de Jesús que me hizo suspirar, por lo bella y expresiva que era. Representa a Jesús agarrando por detrás a un chico en vaqueros, que tiene una pinta destrozada y parece estar en estado de inconsciencia. Jesus, con toda ternura, le transporta, y le da un abrazo súperexpresivo (pinchad aquí para verlo).

Pero cuando me quedé anonadado fue cuando el amigo que me la había mostrado me explicó que le contaron que en la imagen original, el chico tenía en las manos unos clavos y un martillo. ¡Oh! ¡Qué maravilloso el amor que nos tiene Cristo! Nosotros le crucificamos, nos apartamos de Él, y Él llega y nos ama con ese Amor suyo que no merecemos. Le decimos que no queremos vivir una vida según su voluntad, y cuando esta decisión tan contraria a nuestra naturaleza espiritual nos hace agonizar, el viene y nos salva y nos devuelve la vida que habíamos perdido por el suicidio espiritual de querer hacer nuestra real gana. Y ahora que escribo esto tengo especialmente presente este misterio de la misericordia de Dios, pues hará una hora más o menos que me he confesado, volviendo a sentir ese perdón, ese abrazo, a ese Jesús que me transporta en brazos sin importarle que yo haya intentado (conseguido) crucificarle. Esta imagen me ha hecho darme cuenta de las tantísimas veces que estaba perdido, y he sido encontrado por Él. Tendría que pasarme la vida de rodillas por la inefable misericordia de Cristo.

Pero en vez de eso, pierdo el tiempo en estupideces, dejándome caer una vez y otra y otra más. Sé que Él me recogerá, y me he acostumbrado a ese milagro. Si es que soy un asqueroso calculador.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta es nuestra perenne lucha para alcanzar la santificación. Siempre caemos una y otra vez, pero ahí está el misericordioso amor de Dios que nos levanta y nos invita a seguirle a pesar de nuestras infinitas miserias. No hay nada como la sincera confesión. Lo que diré no es nada teológico, pero en el ser humano no hay nada más grande y maravilloso que esa capacidad de pedir perdón y de dar gracias.

Un saludo.

Elinge dijo...

Hola Lukas:

El en cuentro con Jesús en la Confesión sacramental es maravilloso.Misericordia y Majestad.

Aprendemos a perdonar de Verdad.

Te invito a que mires otra imagen; de Velázquez, el cuadro llamado de las Lanzas, La rendición de Breda, personajes y suceso histórico, la derrota, el perdón, la amistad, la alianza.

Anónimo dijo...

Lukas.

¿Qué pasará dentro de diez meses?

¿Por qué vas diciendo estas cosas?

¿Estás bien?

... de salud digo.

Me has llegado a preocupar con esas intrigas...

¿Seguro que estás bien?

Un abrazo.

Spek

Ciudadano de Sión dijo...

Sí, Spektro, estoy bien. Estoy en medio de un momento duro mi vida, pero de salud ando bien, tanto física como psíquica, no te preocupes. Gracias por preguntar.

Lukas ROmero

P.D.: Lamento que el hecho de no poder desvelar momentáneamente lo que ha de pasar te haga ponerte en lo peor... ya lo contaré, tranqui. Pero algo malo no es.

Anónimo dijo...

Ah, bueno. Si no es malo haz lo que quieras. Faltaría más. Saludos.


Spektrum 16k

LCV dijo...

Pero la reincidencia en el pecado amigo también se paga, y no se paga acá donde no tenemos vuelta, porque acá no fuimos capaces de tomar en serio la misericordia y el perdón.
Por algo hay un juicio final y justo.
No requiero respuesta.