martes, 1 de julio de 2008

La persecución

"¿Va a ser más el discípulo que el maestro?" Estas palabras son del conocido discurso de nuestro maestro Jesucristo, y en él nos da a entender que si a Él le persiguieron, ¿qué no nos harán a nosotros?

La persecución es algo que alcanza a todos los hombres y obras de Dios. De hecho, yo considero una prueba de que algo viene de Dios el hecho de que la gente que lo inicia o secunda sea perseguida. ¿Que por qué os cuento esto? Por el "maravilloso" reportaje sobre Kiko Argüello y el Camino que ha publicado el País. Le ha tocado al Camino lo que ya le pasó al Opus o a los Legionarios de Cristo o a tantos otros: ser ortodoxos es ser "ultraconservadores", incitar al apostolado y la evangelización es ser sectarios y proselitistas, etcétera.
Dios permite pasar por el fuego de la tribulación a sus seguidores, para purificarlos y porque les ama. A alguien que no te importa no le corriges, corriges a los que quieres. Ese es el sentido de la persecución, y es curioso ver cómo no sólo los movimientos, sino también los grandes santos han sido perseguidos, y a veces por miembros de la Iglesia (lo que se conoce como "la contradicción de los buenos"): el padre Pío, el santo Cura de Ars, san Juan Bosco, el siervo de Dios Juan Pablo II o la beata Teresa de Calcuta... en fin, todos, todos los que aman y siguen a Dios fielmente. De todos se han dicho calumnias, se les ha puesto zancadillas, han tenido obispos que desconfiaron o les acusaron de herejes...

Pero esto no busca ser teórico. Pensemos en nosotros. ¿Hemos tenido problemas por ser cristianos? ¿Se han burlado de nosotros por expresar nuestras firmes convicciones: Cristo, la Virgen, la Eucaristía, la fidelidad al Papa, los dones del Espíritu Santo? Si la respuesta es no, puede ser porque no es lo que nos toca aún... o puede ser porque no estamos dando tanto testimonio como deberíamos. Que cada uno examine su conciencia.

Dice san Pablo que "predicar la cruz implica persecución". Si no la hay (aunque puede ser que no pase nada), examinémonos un poco preocupados.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Suscribo todo lo que dices, sencillamente se sabrá que somos Cristianos por todo esto... no hay más que añadir.

Ciudadano de Sión dijo...

Gracias por coemntar. Opusprima.

Anónimo dijo...

Pues me podríais echar una mano, porque justo en estos momentos me están crucificando en los dos blogs de putoloko, dedicando incluso entradas enteras a reirse de mí y del cristianismo, y están ofendiendo cada vez más a todos los cristianos... Están diciendo una de barbaridades inadmisible. Se están riendo de lo más sagrado (y pringándose para siempre, todo sea dicho de paso, lo cual es terrible, y no paran de mofarse...)...

Ciudadano de Sión dijo...

Te echo una mano, Spektro. Aunque debo decir que la solución para puto o Alexkev no es tanto la argumenatción, porque ellos están acostumbrados a argumentar, como la oración por ellos.

Lukas Romero

Elinge dijo...

Hola Lukas:

Cuando la persecución es personal, el Señor descubre tus apegos a las criaturas y te sacude para que así, sueltes, es que somos pelín burricos, Él lo sabe y emplea la vara, por que somos hijos y no bastardos, dice el Apóstol.

Cuando es a organizaciones o cuerpos o batallones de la Iglesia, es batalla contra toda la Iglesia, San Miguel defiende y cerramos filas, nos toca el papel de alférez de Cristo Rey, con ello se criba mucho intruso y elimina levaduras en toda la Santa Madre.
Cuando el enemigo tienta o ruge como 'fiero' león, entre otras cosas es porque está afuera y de allí el gozo de la persecución, el Mundo, como siempre, no lo entiende...porque no puede.

Oración.En efecto esa es la clave. Nuestros hermanos esclavos nos necesitan. ¡Que alegría San Dimas!

¿viste la película de Disney el Hermano rabito y el muñeco de brea? De Dios ante los hombres hay momentos para los argumentos y palabras y otros momentos para el silencio.De los Hombres ante Dios siempre es momento para hablar y escuchar.

Anónimo dijo...

Hola Lukas!! Hace mucho tiempo que no me paso por aqui.

Qt estas? Cmo has acabado el curso?

Me ha gustado mucho leer este artículo. Cuanta razón tienes!! Incluso las personas más cercanas y queridas (familiares y amigos) se han burlado muchas veces de mis creencias.
Por un lado me entristece, pero por otro me alegra: por lo visto no lo estoy haciendo tan mal ;)

Muchos besos!



Verónica