lunes, 16 de junio de 2008

Credo

Porque a veces uno necesita apagar la inteligencia; porque a veces no es cuestión de razonar (a veces), sino de exultar, de gritar jubilosos qué grande es en medio de nosotros el Santo de Israel, volver a mirar a Cristo y decirle "¡Amor mío! ¡Tú todo mío y yo todo tuyo!", o sólo mirarle a los ojos y sentirle, y falta la respiración (¿cómo es que me quieres tanto?). Porque a veces necesitamos decir "creo en", y no "creo porque". Porque al final lo que nos salva es el amor de Cristo. Por todo esto, yo recito el Credo por las noches, muy despacio, saboreando cada palabra. Qué suerte poder hacerlo. Qué desgraciado el que no pueda tener esta suerte.

4 comentarios:

ErmitañoUrbano dijo...

Lukas, sigo de cerca tu blog. Te felicito. Hoy entre el el blog amigo de cristianismo ortodoxo, y te recomiendo el articulo de P. Evdokimov. Unidos en la santa misa.

Ciudadano de Sión dijo...

Gracias, Ermitañourbano.

Elinge dijo...

Hola Lukas:

Me encantan las Frases Extremas que escribes, me descubres muchos nuevos pastos, sí Señor, ¡Tú todo mio!, y entonces cuando me veo.... ¿cómo me cuesta tanto ser TODO tuyo?, que alegría si al final del día veo que sí, que hoy Señor... he sido TODO tuyo,¡ Gracias !, porque pequeño como soy, sin Ti no puedo nada.
¡Gracias!, por que al ser como soy, nada, como tal no puedo nada,y más necesito de Ti, ¡mi Todo!.
Sí Madre,en el amor encuentro tu fruto; Dios es Amor, y en la humildad, mansedumbre y en la sencillez,¡ me maravillas Señor!,¡Que alegría más grande!; ¡Dios es Sencillo! yo con Teresa, ¡sólo Dios Basta!.

No se entrega a los pequeños por capítulos en sesudos cursos de Teología, sino secillo y completico en el Sagrario. ¡Gracias amor mío!

¿Donde le enseñaron a la carmelita Sor Isabel tanto acerca de la Trinidad?...y mira que dijo;

Vivamos con Dios como con un amigo, tengamos una fe viva para estar en todo unidos a Dios.

Dios en mí, yo en Él, he ahí mi vida... ¡Oh Jesús, haz que nada pueda distraerme de ti, ni las preocupaciones, ni las alegrías, ni los sufrimientos, que mi vida sea una oración continua.

El Amor habita en nosotros, por ello mi vida es la amistad con los Huéspedes que habitan en mi alma, éstos son el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Que mi vida sea una alabanza de Gloria para las tres Divinas Personas.

Anhelo llegar al cielo, no solamente pura como ángel, sino transformada en Jesucristo crucificado.

La adoración es un silencio profundo y solemne en que se abisma el que adora, confesando el Todo del Dios Uno y Trino, y la pequeñez de la criatura.

Nuestra adoración debe unirse a la otra adoración más perfecta: la adoración de Jesucristo, quien adora a Dios Padre en el Espíritu Santo, quien se ofrece como Hostia Viva.

Oh, Dios mío, Trinidad a quien adoro, ayúdame a olvidarme enteramente de mí misma para vivir en Ti.

Te adoro Padre fecundo, te adoro Hijo que nos ayudas a ser hijos del Padre, te adoro Santo Espíritu que sales del Padre y del Hijo.

Morir a mí misma en cada instante, para vivir plenemente en Cristo.

¡Oh Dios mío, apacigua mi espíritu, apacigua mis sentidos exteriores.

Mi alma se alegra en Dios, de Él espero mi liberación.

Quiero ser una morada de Dios buscando que mi corazón viva en la Trinidad... Un alma en estado de gracia es una casa de Dios, en donde habita Dios mismo, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Oh Trinidad amada tú habitas en mi alma, y yo lo he ignorado.

Todo pasa. En la tarde la vida, sólo el amor permanece... Es necesario hacerlo todo por amor. Es necesario olviarse de uno para vivir en Dios.

El Señor está en mí y yo en Él, mi vida en el tiempo no es otra que amarle y dejarme amar; despertar en el Amor, moverme en el Amor, dormirme en el Amor.

El Señor nos invita a permanecer en Él, orar en Él, adorar en Él, amar en Él, trabajar en Él, vivir en Él.

No debemos detenernos ante la cruz, sino acogerla con fe y descubrir que es el medio que nos acerca al Amor Divino.

He encontrado el cielo en la tierra, porque el cielo es Dios, y Dios está en mi alma.

...Y si te asomas al Diario de Sor Faustina Kowalska... leerás sumergido en Dios, segurico que ya lo conoces. ¿cuál es el mayor don de Dios? ¡Gracias de nuevo Señor! sí,¡ Dios es Misericordia !.

Ciudadano de Sión dijo...

Gracias, Elinge, por la citas y por el comentario.

Un abrazo en Cristo.

Lukas Romero